Desde épocas prehistóricas, la raza humana ha utilizado la arcilla para cubrir muchas de sus necesidades, este conjunto de sedimentos y partículas de rocas que llamamos arcilla nos ha ayudado a entender como pensaban nuestros antepasados, gracias a diversas esculturas podemos ver a través de sus ojos.
Además no podemos ver a la arcilla como si fuera solamente ese elemento que se utiliza para crear bellas obras de arte, va mucho más allá, la arcilla nos ha ayudado a conocer el pasado, pensemos en las figuras realizadas por las culturas precolombinas, gracias a ellas podemos saber con certeza que existían perros en el continente americano antes de la llegada de los colonizadores.
Vayamos más atrás, unos miles de años antes de Cristo, en la región mesopotámica entre los ríos Tigris y Éufrates, aquí encontraremos a los sumarios, quienes fueron capaces, al escribir sobre tablillas de arcilla, traspasar de generación en generación los conocimientos de la escritura cuneiforme.
Pero aún más atrás encontraremos lo que se cree, fue el primer uso que se le dio a este material, simples vasijas utilizadas para almacenar agua y comida.
La arcilla es un material muy resistente que caracteriza por su facilidad para ser moldeado cuando esta húmedo, debido a su composición puede pasar por una gran variedad de tonos, colores claros, rojizos y oscuros son los más comunes, mientras que al variar la composición de este elemento se podrá utilizar en diversas tareas, sin duda alguna la arcilla es un material que hay que tener siempre en cuenta. Incluso en Malawi utilizan pequeños generadores que funcionan con el calor del recipiente de barro en el que cocinan. En este país de África Oriental solo el 10% de población tienen acceso a la electricidad.
¡Es sorprendente! SÍ PINCHAS AQUÍ verás un vídeo de la BBC dónde te enseñan cómo cargar la batería de un móvil con un vasija de barro
¿Cuántas piezas de cerámica tenemos en nuestra casa?
Quizás respondamos la pregunta sin vacilación, emitiendo con firmeza algún numero después de haber contado mentalmente la que nos acompaña en el dormitorio y las dos esculturas que tenemos en la sala de estar, sin embargo, estaremos equivocados, al entrar a la cocina podremos ver los platos de porcelana, el inodoro en el baño y en nuestros pies, las cerámicas que relucen en la habitación, todos estos objetos están hechos de arcilla, sólo que cada uno de ellos tiene una composición diferente que los convierte en piezas totalmente distintas, de manera que llegamos a nuestra pregunta inicial:
¿existe alguna diferencia entre arcilla y barro?
¡Si! La arcilla corresponde al conjunto de sedimentos y demás partículas que unidas y húmedas se convierten en esa pasta que podemos moldear, la composición puede ser cualquiera y por ende las tonalidades de colores infinitas, el barro, por otra parte, corresponde a un tipo de arcilla, con una composición característica, que sin la adición de ningún colorante tiende a ser de un color rojizo.
Sin duda las obras realizadas en arcillas son únicas en inigualables, le dan vida a cualquier hogar y realzan la belleza de cualquier habitación, son piezas de arte que no sólo son simples adornos, llevan consigo miles de años de historia y si son tratadas con delicadeza, perduraran por siempre.